EL PSICODRAMA BIPERSONAL- PSICOLOGO. OCTAVIO HUERTA TORRES- UEES ECUADOR

EL PSICODRAMA BIPERSONAL. Para Revista de Psicología Universidad de Especialidades Espíritu Santo. UEES - Ecuador

El Dr. Dalmiro Bustos, cree que es posible en ciertos casos abordar pacientes graves utilizando el  Psicodrama Bipersonal. Esto es, donde únicamente intervengan el terapeuta y el paciente. “Cuando las personas demandan una psicoterapia y entran con una conflictiva aguda, altos niveles de ansiedad y llenos de situaciones graves que no pueden resolver, y más en el caso de esta patología, corresponde brindarle el contexto terapéutico donde va a ser el único foco de atención del profesional; no toleraría oír problemas de otros o tener que preocuparse por la compleja dinámica pluripersonal que se origina en un equipo terapéutico. La otra persona, receptiva y a su total disposición, es indispensable”[1].

Enmarcados en la psicoterapia psicodramática, pensando también, en la fragilidad emocional de los pacientes con Trastorno Límite de la Personalidad (considerados graves), en el abordaje terapéutico con ellos, solo sería recomendable emplear estas dos variables; Bipersonal o Individual.   

Las referencias, con respecto al por qué utilizar Psicodrama Bipersonal con este tipo de pacientes, son Europeas. Un ejemplo, son los trabajos realizados por el Psicólogo/Psicodramatista español Teodoro Herranz Castillo, que en cuanto al Psicodrama Bipersonal,  su especialidad, comenta: “Así, la psicoterapia psicodramática Bipersonal, al reproducir el vínculo madre-hijo, permite investigar, organizar y reparar las primeras relaciones afectivas, en un contexto más protector, en el que el paciente es el único foco de atención del terapeuta”[2].

Con relación al Psicodrama individual, este mismo autor expone lo siguiente: “…tratamiento que puede solaparse en el ámbito de la aplicación con el Psicodrama Bipersonal…he podido comprobar cómo puede ser el tratamiento más adecuado cuando el tiempo de intervención es limitado y, en algún tipo de trastornos de personalidad, como preparatorio para un tratamiento a largo plazo, o como una psicoterapia de apoyo que puede dejar a la persona asintomática.”[3]

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[1] D. Bustos. 1985 “Nuevos rumbos en psicoterapia psicodramática” (pág. 97). Buenos Aires: Momento

[2] Herranz, T. (1999). “Psicoterapia Psicodramática individual” (Pág.37). España: Descleé Brouwer

[3] Ibid (pág. 45).

*Revista, electronica y actual, psyquis,psiquis, de psicología Guayaquil, Ecuador